A veces ni nosotros entendemos con qué fin la vida nos lleva a tomar algunos caminos y decisiones

Hacen 13 años dedique mi empeño y atención en el montaje de un hogar geriátrico, esta actividad se convirtió en mi pasión y motivo de vida, sin embargo, no comprendía en el fondo porque la vida me llevaba una y otra vez a trabajar en ello. Al pasar los años mi madre quien nunca dejo de apoyarme en este proyecto, enfermó, y necesitó de todo cuanto yo había aprendido para vivir. Ese era el motivo, yo era la elegida para atender su enfermedad y este sería su legado.

Entender a quienes han perdido su autonomía y enseñar a quienes los cuidan es mi propósito en la vida. Así lo entiendo hoy como también entiendo y espero cuando la vida me trae decisiones que no logro comprender porque indiscutiblemente habrá un propósito para ello.